TONY RODRÍGUEZ
NO HAY MALHECHORES en este país, hay
aprendices, hay resentidos, excluidos de políticas desarrollistas, bienhechores
de lo que enseña el cine, la tv y las redes informáticas. Hay imitadores de
aquellos que manejan la cosa pública, insensibles como aquellos que le roban al
Estado sin importarles la salud y la educación al pueblo.
NO HAY TUMBADORES NI ASALTANTES NI
DESCUIDISTAS sino gente que aprovecha las oportunidades, los encantos del
dinero y de la buena vida.
NO HAY MORAL para denunciar ni exigir nada,
al menos si es usted de los que violan la luz cuando está roja, de los que no
respetan la autoridad y la ley, de los que evaden los impuestos y vulneran los
servicios públicos.
República Dominicana no es el infierno,
tampoco es el paraíso, es simplemente el resultado de quienes nos descubrieron,
de quienes nos colonizaron, de quienes nos evangelizaron, de quienes nos
mezclaron para que fuéramos lo que somos, europeos, aborígenes y africanos,
todo y nada.
SOMOS QUIENES SOMOS, descendientes de
Cristóbal Colón y sus acompañantes europeos, herederos de la estrechez mental
de los esclavos, defectuosos del germen de la ambición desmedida y despiadada
de los colonizadores, víctimas y victimarios, descendientes de Enriquillo, de
Lemba y Alonso de Ojeda.
NO ES USTED NI SOY YO el mejor ejemplo para
condenar a malhechores, oportunistas, chapiadoras, violadores y frenéticos
amantes de lo ajeno, si somos incapaces de someternos al imperio de la ley,
caiga quien caiga, sin somos, por defecto, no por virtud, marcados por el
destino de quienes nos antecedieron.
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