jueves, 27 de abril de 2017

Coopsano estrena nueva imagen corporativa

 

Según el gerente general de Coopsano, Ingeniero Nicanor Rodríguez, el cambio es para ajustar la imagen, la misión y la visión a los nuevos tiempos.


Tony Rodríguez
 
Provincia Santiago Rodríguez.-  La Cooperativa Sabaneta Novillo, presentó su nueva imagen, en un acto celebrado en la casa club de la entidad financiera.
 
Ante socios, relacionados y medios de comunicación, el presidente del Consejo de Administración de Coopsano, Diorys Estévez, dijo que tras 41 años de acompañamiento en la gestión de progreso de la comunidad que la vio nacer, la institución ha dado un salto cualitativo al producir el cambio de imagen.
 
Ing. Nicanor Rodríguez
Diorys Estévez
Según el gerente general, Ingeniero Nicanor Rodríguez, el cambio es para ajustar la imagen, la misión y la visión a los nuevos tiempos, lo que ajustará la entidad a los amplios sectores que representa y a las exigencias de un mercado cada vez más competitivo.
 
 
La Cooperativa Sabaneta Novillo cuenta con un capital de más de cinco mil millones de pesos y una cartera de más de noventa mil socios.  Su presencia a través de sucursales en Montecristi, Valverde, Santiago y la sede principal en Santiago Rodríguez.
 
El obispo Diómedes Espinal pronunció la evocación a Dios por los logros de Coopsano.
 
 
Morrison Interprise fue la empresa contratada para producir el nuevo logotipo y la línea gráfica de la marca Coopsano.
 
El artista Betances Saxo animó la velada con su instrumento musical.
 
En el acto se presentó el nuevo spot que se difundirá a través de los medios electrónicos de comunicación.

lunes, 10 de abril de 2017

LA CONFRONTACIÓN DE PATRONOS Y TRABAJADORES DOMINICANOS

Tony Rodríguez /periodista-abogado

Santiago.-  La decisión del Comité Nacional de Salarios (marzo-2017) de aumentar un 20 por ciento al salario mínimo del sector privado, ha puesto en vigencia una vieja discusión de patronos y trabajadores.

Hace años que el sector patronal busca eliminar de la ley laboral 16-92 la denominada cesantía, a los fines de disminuir la carga laboral.

Según los empresarios, representados en el CNS por Copardom, plantean anular la decisión de aumento de 20 por ciento al salario mínimo no sectorizado, para volver a la mesa del diálogo, donde se proponen retomar el tema de la eliminación de la cesantía.

La postura patronal establece que el aumento de un 20 por ciento al salario mínimo solo puede ser posible si se elimina el auxilio de cesantía.

Cesantía: “Las cesantías buscan que el trabajador una vez quede sin trabajo, tenga unos recursos que le permitan sobrevivir mientras consigue otro. Con las cesantías se supone que el trabajador no queda desprotegido ante el desempleo que siempre está a la vuelta de la esquina. Las cesantías son una forma de ahorro que es aportado por el empleador o empresario, ahorro del que disfrutará el empleado una vez termine su vinculación laboral”. Wikipedia.

Parece una propuesta razonable, toda vez que el sector productivo dominicano está castigado por el peso de la carga fiscal, la carga laboral y los sobrecostos basados en las deficiencias de los servicios públicos.

Son sobrecostos los gastos en plantas eléctricas, combustibles para suplir la falta de energía, pagos de seguridad, coimas y otros despropósitos del sistema.

Los empresarios añaden que la carga de la seguridad social les resulta pesada, unido al salario 13, bonificación y otras prestaciones laborales.

Sostienen que eliminando la cesantía, los salarios dominicanos podrían entrar en una etapa hacia la nivelación con el promedio salarial de América Latina.

De su lado los trabajadores, son reacios a ceder derechos adquiridos.  Al contrario, las luchas sindicales apuntan a ganar terreno en mejoramiento de la seguridad social, el recorte del horario laboral, humanización del trabajo y nivelación salarial con el contexto internacional.

El gobierno, que representa el tercer soporte del comité tripartido, en 2015 avaló la propuesta de los empresarios de ajustar un 12 por ciento al salario mínimo, mientras en 2017, dio un giro al apoyar la propuesta de los trabajadores de aumento de un 20 por ciento.

Lo importante es que se imponga la cordura en los distintos actores del sistema.  Nadie puede negar que el trabajador dominicano es mal pagado, tanto en el sector público como privado.

El empresariado tiene sus razones, sobre todo cuando invoca que las micro y pequeñas empresas no podrán absorber el aumento de un 20 por ciento al salario mínimo.

El gobierno, parece estar a tono con las presiones de los trabajadores, debido a que insatisfacción social termina afectando a la clase política oficialista.


El país debe encaminarse a un gran pacto laboral, en el que todos pongan sobre la mesa sus aspiraciones, y que se concluya con un compromiso que a todos favorezca.  Parece difícil, pero es posible, con el diálogo y el espíritu de comprensión, todo es posible.